domingo, 16 de enero de 2011

REBAJAS

                     



                   
                  En este periodo de tiempo, hasta la más hermosa de las personas se puede convertir en el más cruel de los demonios, y todo por unos vaqueros con el 40% de descuento, o una televisión con un 10%. Realmente, las rebajas, sacan lo peorcito que cada uno lleva dentro, nos transforma en seres maleducados y soeces, en una manada de cabestros con total carencia de modales y humanidad, yo personalmente he visto a gente discutir airadamente por una camiseta, como si de ello dependiera la vida de sus hijos.
De hecho hay gente, que lleva esperando mucho tiempo que se inicie esta etapa en los comercios, ya que por falta de tela, no pueden comprar las cosas más caras, así que es en este momento cuando van a poder hacerse con ello, esto les genera una alto nivel  de ansiedad y estrés, porque lo necesitan, lo ansían.

                  Tampoco hay tantos “chollos”, y los poquinos que salen, o bien se los quedan los propios empleados ( pero no los vendedores que te lo cobran a ti en la tienda, esos se pillan algo, pero lo bueno de verdad se lo apropian los listos de sus jefes), o los pilla el aguililla de turno, que se ha pasado la noche esperando a que abrieran el negocio. Sobre este espécimen ultimo, debo añadir, que siento miedo, porque existan personas capaces de tales actos, pensarlo, si un tio/a puede esperar durante una noche entera, pasando penalidades de todo tipo (frio, hambre, humillación, insultos,etc), por entrar el primero, y tras abrir las puertas correr hacia su objetivo con la velocidad de Bolt, la potencia de CR7 y la agresividad de Mike Tyson, y todo por conseguir algo tan miserable como un vaquero de Armani Jeans, o un abrigo de Ralph Lauren, o cualquier gilipollada así. ¿De que será capaz este personaje en caso de que alguien se la juegue?.

                    Los primeros días son los peores, ya que todo el mundo acude de forma compulsiva a los centros comerciales a comprar un montón de basura que no necesitan para nada, pero en esta sociedad del consumo nato, quien puede resistirse a comprarse un par de jerséis y unos vaqueros nuevos, aunque tengas catorce de cada en tu armario. Como decía, los dos, tres primeros días son una barbaridad, parece que en lugar de comprar, la gente va a que se lo regalen, y muchas personas se gastan unos pastones aberrantes, cosa que, probablemente no harían jamás en fechas normales, pero claro con la excusa de “tenemos que aprovechar, que está todo a muy bien precio”, pues dejan de lado cualquier tipo de escrúpulo, para poder comprar a saco. Esto sería  más o menos  valido en el caso de que en los periodos de rebajas compráramos para el resto del año, por ejemplo en el tema de la ropa, pero eso no es así, los mismos que usan esta excusa, gastan durante todo el año, comprándose más  jerséis y vaqueros.
Por otro lado lo que más me jode de todo esto, es que se rebajan los precios de la ropa, el calzado, alguna cosa del hogar, informática y poco más. Pero el cabrón del estanco no me rebaja el tabaco ni un céntimo, el del bar no me pone las birras y las gambas más baratas, el cine sigue siendo supercaro, los cubatas tampoco bajan, el futbol tampoco se pone de saldo, si se me jode algo del coche, no viene el mecánico y me dice “ no te preocupes George, este mes estamos de rebajas, te voy a cambiar esta pieza de dos milímetros de grosor que se te ha estropeado, pero solo te cobro la mitad, vamos 300 euros” (con estos del taller, no habría forma ni con las rebajas).
No estoy pidiendo nada en especial, solo que durante el periodo que estén con este rollo, que son un par de mesecillos (mes y medio, mas bien), pues que lo rebajen todo, no solo las ropitas, sino también las cosas que ocupan nuestro ocio, aunque pensando fríamente, si en  el asador Donostiarra les dieran por los precios populares no habría dios que entrara en todas las rebajas, ¿ esto porque sucedería?, por los psicópatas que mencionado antes, los que duermen en la entrada del sitio, para ser los primeros en entrar, esa manada de chalados nos iban a joder bien a los demás.

                         Las rebajas no dejan de ser un total timo, enmascarado con unos descuentos fenomenales, os doy un consejo respecto a la ropa, fijaos muy bien, que todo lo que mola y es agradable a la vista, o bien no tiene descuento alguno, o tiene el menor descuento posible, y que, todo lo mas cantoso, cutre y espantoso, tiene como mínimo “hasta un 50% de descuento”.  Solo quiero llamar vuestra atención, en que la idea inicial, el objetivo, es colocar la chusma que no han podido vender a su precio original, e intentar sacarte el máximo de pasta posible con las cosas que saben que molan y se han vendido bien durante la temporada, no hay ningún tipo de buena voluntad, ni bondad por parte del comerciante, solo se pretende vender la broza, para ir haciendo hueco a las cosas de la nueva temporada.
Por último andaros con ojo con los “superchollazos”, sobre todo porque tienes que ser consciente que un abrigo de los supercaros, nunca te puede llegar a costar 30 euros, porque hayas tenido una suerte bárbara, sino porque probablemente lleva tantos años guardado en un almacén que al final cuesta a precio de saldo. Un buen consejo es usar vuestro olfato, olerlo, si “jumea” a humedad o a viejo (vamos como el jersey que tiene vuestro abuelo para estar por casa), es que lleva allí desde 1997, que lo han sacado para ver si este año algún gilimongo cae y lo compra. Por otro lado palparlo, si tiene pelotillas, es “superfino” y suave ( es porque la tela esta pasadísima, atrévete a sudar con ella, veras que risa). Solo las tallas para súper-gordos o súper-enanos son realmente validas, porque al ser tan exageradamente grandes o pequeñas, se rebajan para poder darlas salida, a unos precios realmente buenos. Los tallas medias nos jodemos y nos comemos precios más altos y posibles “cutre chollos” en los distintos centros comerciales dónde sacan toda la broza que se encuentra en sus almacenes.

En definitiva, no os gastéis mucho, intentar comprar lo que realmente os haga falta y si os pegáis un capricho pues fenomenal, que tal y como están las cosas, alegrarnos un poquito la vida, aunque sea con unos vaqueros nuevos, no nos vendrá nada mal a ninguno…….