miércoles, 26 de enero de 2011

LA BURBUJA

                    


                   A todos nos ocurre, estando solteros/as, que una mujer o un hombre nos atrae de una forma especial, puede ser por su físico, tal vez por su personalidad o por la unión de ambas cosas. Sentimos una enorme necesidad de estar cerca de ella, hablar con ella, reír con ella, es decir, que nos emboba su presencia, nos gusta. Haremos cuanto esté en nuestra mano con tal de conseguir una cita con esa persona, y si las cosas salen bien, pues te lías con ella y todo lo demás, inicias una posible relación…..
Es aquí cuando surge un fenómeno al que yo denomino “LA BURBUJA”, esta se puede definir como un periodo de tiempo en el cual estas tan ilusionado y cachondo, que puedes llegar a confundirlo con el amor, pero simplemente estas atontado por la felicidad de haber pillado con la persona deseada y lograr estar con ella.
Esta rareza se manifiesta a las pocas semanas de iniciar una relación con otra persona, a la que crees que adoras y necesitas más que nada en el mundo.
Por otro lado no confundamos el “enchochamiento” con la “burbuja”, ya que el primero es meramente sexual, solo quieres ir a la cama con esa persona una y otra vez, poco mas te interesa de ella. La burbuja es más complicada, ya que es una especie de amor ficticio.
¿Por qué es un amor ficticio?
      Debido a que aporta las mismas sensaciones que un enamoramiento inicial, es decir, un exaltamiento inexplicable, una necesidad enorme de ver a esa persona, ilusión si limites, horas y horas pensado en ella y un gran nivel de apasionamiento.
Todo esto es muy bonito, siempre es genial sentirse así, ver las florecillas y tener ganas de componer bellos versos, estar alegre y contento, esperar el día que has quedado con ella ilusionadísimo, como si fueras a ver la final de la Champions League. Es algo fabuloso y magnifico que en muchas ocasiones le da sentido a la vida, cuando es autentico claro.
Pero,¿ que ocurre cuando uno está bajo los efectos de la burbuja?, pues bien, todos sabemos que una burbuja de jabón, se rompe con una gran facilidad al tocarla, pues aquí ocurre lo mismo, un día te puedes levantar y darte cuenta de lo poco que soportas a esa chica/o del que creías estar tan enamorado/a.
Un ejemplo para entenderlo mejor:
                Manolito conoce a Bartolita, se llevan muy bien, se atraen, tienen un cita y se enrollan; después se lo pasan superbién juntos, salen de fiesta, van al cine, cenan por ahí, etc. Inician lo que a todos los niveles parece una relación sentimental, o por lo menos los cimientos iniciales.  Entonces Manolito sufre “la burbuja” sin ser consciente de ello, así que pensara que se está enamorando de Bartolita a cada día que pasa, pero realmente lo que esta es bajo los efectos del triunfo y el sexo, es decir, ha conseguido lo que quería y lo está disfrutando. Debo decir que contra más tiempo lleves sin chingar, mas altas son las posibilidades de sufrir la burbuja con la primera que te pinches.
Pasaran los días, llamándose a todas horas, mandándose sms, disfrutando de cada segundo juntos y saboreando ese “amor” que está naciendo entre ellos, es posible que ella sí que se esté pillando por Manolito, debido a que la mujer, por norma general, es mas enamoradiza y sentimental  (eso no implica que las mujeres también se vean afectadas por “la burbuja”, no importa el sexo en este caso).
A lo que iba, son felices y disfrutan juntos, tanto sentimental como físicamente, pero llega un día en que Manolito sin comerlo, ni beberlo empieza a sentir que Bartolita no es todo lo que se había imaginado que era, evidentemente, cuando uno se siente muy atraído por alguien normalmente idealiza esa persona, dejando de lado sus defectos y exaltando las virtudes que más le atraen de ella, e incluso aportándole alguna que realmente no posee.
Este fenómeno se podría explicar como una “subida del telón”, es decir, de repente te das cuenta de cómo es esa persona realmente y de lo mucho que te desagradan algunos aspectos de su personalidad, cosas que no puedes pasar por alto porque realmente son insoportables para ti (por ejemplo el tono de su voz, su manera de expresarse, utilizando excesivos y continuos diminutivos). No vamos a engañarnos, ya lo habías percibido con anterioridad, pero estabas tan eufórico y tan cachondo que lo pasaste por alto, pero en muchas ocasiones estas cosas pasan, sino todo el mundo se casaría con su primer amor, y no suele ser así en la mayoría de los casos.
La relación entre los dos iniciara una caída libre provocada por la inesperada frialdad de Manolito, que desembocara en largos momentos de silencio, acompañado de conversaciones sin sentido. La pobre chica, tendrá que sufrir unos días este cambio radical que en él se ha producido, hasta que este individuo reúna la fuerza y el valor necesario para cortar con la “relación”, que aun estando recién nacida, siempre provoca frustración para el que la tomo como algo bueno y verdadero.
Finalmente, Manolito mandara a Bartolita a freír monas, esta se lo tomara muy mal (no por demasiado tiempo, ya que tampoco han estado mucho tiempo juntos), lo cual es muy lógico, ya que Manolito parecía que realmente podría ser ese chico bueno y amable con el que iniciar una relación estable y poder pensar en tener un futuro. Lo peor de todo esto es que el “Confiometro” de la persona a la que le toca la parte mala, no vuelve a ser el mismo, le costara fiarse de otros en algún tiempo.
Una frase clave que hace explotar la burbuja es cuando la otra persona te dice “te quiero”, es ahí cuando te darás cuenta si la sufres (porque te entren ganas de salir corriendo) o bien sientes lo mismo.
      La Burbuja no suele manifestarse pasados dos o tres meses, si llegados a esas alturas no la sufriste es que realmente has tenido la suerte de encontrar una persona a la que querer, y que por suerte para ti te corresponde con devoción, y esto señores/as es lo mejor que te puede pasar en la vida “QUERER Y QUE TE QUIERAN”.