LA ELITE SOCIAL
Todos conocéis la clase de
seres a los que me refiero, que componen esta “elite”, los putos “pijos”,
porque se dediquen a lo que se dediquen todos tienen en común este calificativo,
que les distingue claramente del resto.
Individuos
que les gusta más Ralph Lauren que a un tonto un caramelo, seres
que se consideran por encima del resto, simplemente por su poderio económico, que tienes por ser unos putos hijos de
papa y unos enchufados de mierda.
Vivir de la
fortuna de tus papis, o de los yayos, pegarte fiestorros súper guapos, esnifar cocaína,
conducir un Golf a los dieciocho años (regalo de papi), un BMW a los veinte
cuando ya te han colocado en “Pocholo international Enterprise” (negocio de
papi) y disfrutar de todos los lujos del mundo será la única actividad de estos
seres despreciables.
Algunos
pensareis “pero si tienen dos carreras e idiomas”, yo os rectifico
sobre este equivoco generalizado entre nosotros sus “mayordomos”. En primer
lugar, en lo referente a los idiomas, es lógico que aparte del español, hablen
al menos inglés, ya que desde el primer minuto de su escolarización les hablan
en ambos idiomas en sus colegios privados bilingües de puta madre, a esto le
sumamos todos los viajes a USA que hacen para “mejorar su formación”( que
consiste en drogarse, follar y derrochar dinero a raudales). Pero vamos que al
final como poco lo chapurrean los que conservan el cerebro más o menos
funcional.
En esos “coles”
todos los mini pijos crecen juntos y se hacen amiguitos, lo cual será muy
apropiado y beneficioso en un futuro, cuando sean ellos los que lleven los
negocios de los papis.
En segundo
lugar, a estos cabrones las carreras se las compran, a base de muchos euros, los padres en
las universidades privadas de la mas alta categoria nacional o internacional.
Así que
salvo algunas excepciones, que no son otras, que a los que obligan a formarse
para que las grandes fortunas no se vayan a la mierda, la mayoría actualmente
son unos auténticos chulos, disfrazados de soplapollas, con un ego desmesurado,
problemas de drogadicción y un enorme sentimiento de superioridad respecto a
nosotros, la clase media.
Vividores, déspotas,
mezquinos y bastardos, estos son los adjetivos calificativos más suaves que se
me pasan por la cabeza para definir a esta manada de chupópteros que viven de
enriquecerse a costa de la gran mayoría de la población sin pegar palo al agua,
sorbiendo la sangre de sus empleados a los que pagan lo mínimo para poder ellos
levantarse un pastizal mes a mes. Encima tienen la puta poca vergüenza de
quejarse de la falta de beneficios en sus negocios y le lloran al gobierno
ayudas para que sus “perdidas” sean compensadas. Seamos sinceros se puede ser
muy avaricioso en la vida, pero ya serlo y además ser un hijo de la grandísima puta,
creo que es excesivo.
Pongamos un
ejemplo para que me entendáis:
Beneficio de
Pocholo S.A. en el año X=1000millones, en el siguiente año Pocho estima, perdón, exige
a sus empleados una mejoría en los resultados hasta alcanzar los 1500millones,
bien, es lógico que el colega quiera mejorar sus resultados del año anterior,
¿qué ocurre?, que Pocho se pasa por los cojones que haya crisis nacional,
internacional o interplanetaria, el solo quiere llevárselo calentito y el resto
es cosa de la chusma que contrata y que lo único que hacen es llorar por lo
poco que les paga y no pegan golpe (pobre Pocholo que buena persona es, y que Ferrari
más humilde tiene).
Finaliza el
año y el resultado son 1350millones, que putada para Pocho, no ha conseguido
los 1500, así que se declara en perdidas el muy hijo de puta, habiendo obtenido
350millones mas que el ejercicio anterior, lo que supone despidos de
trabajadores en sus empresas y empeoramiento de las condiciones de trabajo para
sus empleados (bajadas de sueldos, incrementos de jornada y cositas chulas de
ese tipo).
Pocholo ,si
puede, pedirá auxilio al gobierno para que le ayuden a obtener esos 150 millones
que no ha ganado por culpa de la chusma de trabajadores que tiene contratados.
Lo mejor es
que claro, ese dinero que les van dando a todos estos pijos, grandes
empresarios y banqueros, se supone que es la pasta que nos tendrían que dar a
los ciudadanos de a pie para poder relanzar las PYMES, obtener créditos para
comprar pisos y demás cosas estúpidas que necesitamos los esclavos de la clase
media.
Mientras a ellos
les siga funcionando el negocio y trinquen su pasta nada va a cambiar en un país
tan podrido como este, donde todos los altos cargos están donde deben estar con
un propósito y sabiendo muy bien lo que deben hacer y a quien tienen que
favorecer.
Nosotros la
clase media a comer basura, a vivir como podamos y a cobrar una mierda, para
que los señores que nos dan trabajo puedan seguir acumulando riquezas para que
las próximas doscientas generaciones de su familia puedan seguir viviendo del
cuento, y porsupuesto de las subvenciones y ayudas del gobierno.
No sé en qué
momento de la historia el hombre domestico al hombre, quiero decir, en la
actualidad, en el mundo desarrollado, ultra informado y bien educado, nadie es
capaz de mover un solo musculo por hacer mejorar las cosas. El dominio de los
medios de comunicación y del dinero hace imposible que la gente puede hacer
nada por su cuenta sin que lo aplasten de inmediato.
El miedo, el
instrumento de control de mayor calidad y eficacía utilizado por el hombre a lo
largo de toda nuestra historia, nos atenaza a todos, no queremos perder lo que
tenemos, pero ese miedo nos impide mejorar nuestra situación, porque más vale pájaro
en mano que ciento volando ¿no?.......pues no!
Solución
para todo esto, ¿que el pueblo se levante en armas y quite de en medio a los
pijos dominantes?, sinceramente creo que no funcionaria, simplemente surgiría una
nueva clase de pijos, con el tiempo, y las grandes multinacionales se encargarían
del resto, para conseguir de nuevo la reaparición de la clase alta o de elite.
Un buen “baño de oro” (paaaasssta) y todos los superlíderes ultrachupis que
aman a los pobrecitos se convertirán en una manada de seres despreciables, tal
y como lo fueron sus derrocados antecesores.
Señores es
el dinero lo que lo pudre todo, lo que corrompe hasta al más integro, lo que
acaba con la ética del hombre porque todo tiene un precio, y aunque muchos
pensamos, “yo nunca haría esto por mis principios y valores”, me gustaría ver
nuestra reacción y posterior forma de actuar si nos pusieran un maletín con trescientos millones de euros
en billetes de cien y cincuenta delante de nuestros morros, a más de uno esa boca que se le llena tanto se
le iba a hacer muy pequeñita, y vete tú a saber la burrada que accederían a
hacer. Es muy fácil ir de incorruptible cuando sabes que jamás en tu vida te van a poner semejante maletín a tu alcance.
Conclusión:
el diablo existe, o el mal, como queráis llamarlo, lo llevamos cerca del corazón,
en la cartera, y por él muchísimos mueren, otros venden a sus hijos, matan a
sus hermanos e incontables atrocidades de esa calaña.
Que cada uno piense lo que quiera, pero por favor, al menos, no nos puteemos unos a otros, que bastante tenemos ya con los cabrones que nos pisan el cuello sin compasión alguna.
Que cada uno piense lo que quiera, pero por favor, al menos, no nos puteemos unos a otros, que bastante tenemos ya con los cabrones que nos pisan el cuello sin compasión alguna.