viernes, 25 de mayo de 2018

EDUCACION



                                     
                                  
                                             Uno se sorprende muy gratamente cuando se cruza en su camino con una persona que es realmente educada, que utiliza palabras como “perdona” antes de hacerte una pregunta o “gracias” cuando le dejas pasar en el portal de casa, pero la realidad, por desgracia, es que el fulano de turno te pregunta directamente, previo gesto orangutanero o ruido extraño para llamar tu atención, y que cuando dejes pasar a alguien sea porque se queda detrás tuya sin decir ni una palabra hasta que te das cuenta de su presencia y le cedes el paso, mas preocupado por tu cartera o el bolso de tu pareja que por si quiere o no adelantarte.

Vivimos en una sociedad en la que la impaciencia y los malos modales de los individuos en todos los ámbitos de la vida genera una manada de maleducados y zafios de proporciones épicas.

Quien no ha estado pacientemente haciendo cola en un centro comercial en la caja del Bersca de turno para que le cobren y de repente ha empezado a escuchar los bufidos y rebuznos de los que se encuentran detrás. La señora que bufa tiene mucha prisa en que la cobren ya que tiene que hacer muchas cosas (siiiiiii claaaaro, muchisimas, por eso esta allí a la una y cuarto de la tarde). Señora, si tiene prisa……tendrá usted que ser paciente y esperar su turno, y si otro día no quiere esperar, organice mejor su tiempo. Pero no, bufido y a quejarse por lo bajo, lo cual encabrona a todos los que la rodean, poniendo nerviosa a la cajera, incomodandola y haciendo que la posibilidad de que falle, retrasando la cola, se multiplique.

Como esta situación se generan miles, en cuanto se forme una cola en la que tengas que esperar mas de dos minutos para que te atiendan.

Normalmente los mayores suelen ser los mas agradecidos y agradables, no suelen escatimar un “gracias” o un “perdone” a la hora de tratar con los demás, por norma general, porque también hay cada cabestro que madre mía. Son generaciones mas humildes, que iban al colegio educados de sus casas, y si la liaban allí, se llevaban la reprimenda del maestro y luego en casa otra de sus padres.

En el colegio se enseña a los niños, estos deben venir educados de sus casas”, eso nos lo dijo el profesor de Lengua en COU, y tenia toda la razón del mundo, ya que muchos delegan, con todo su morro, la educación de sus hijos en los colegios, justificando los malos hábitos y cuestionables comportamientos de sus nenes a que no les educan como es debido en los centros docentes.

Pues de eso nada, cuando un niño lleva a cabo actos inapropiados o susceptibles de un collejón, los responsables de los mismos son su papa y su mama.

Ejemplo:

                            Niño de entre diez y doce años con su balón de fútbol reglamentario bajo el brazo paseando por un centro comercial junto a sus padres, los cuales se paran en una de las tiendas e inician una "lección educativa" para su hijo, exigiendo de malas maneras a la empleada de la misma que les devuelva el dinero porque no les gusta el articulo que les regalaron, la dependienta educadamente les explica una y otra vez que su ticket “regalo” supera los días permitidos para cambios y devoluciones y que no puede hacer nada por ellos.

Mientras los papis están a lo suyo, el pequeño lanza el balón a unos metros de él, coge carrerilla y chuta con todas sus fuerzas, la bola sale disparada hacía una columna llena de baldas con sus correspondientes articulos en exposición.

Si al niño se le hubiera ido la pelota un poco mas a la derecha le hubiera dado en la cabeza a su papa, ojala le hubiera rozado un poquito. Pero como no ha sido asi, ni se han enterado del balonazo que ha pegado el colega, y ruido ha hecho al golpear la columna.

Eso si, los allí presentes se quedan alucinados al ver que los papis ni se inmutan ante los actos de su hijo, que recoge la bola vuelve a su posición inicial y repite la jugada, el balón impacta en un mueble, tirando varias prendas, por lo que, ante la constante pasividad de los papis, otra persona decide educadamente regañar al adorable niño “hola guapo, esto no es un parque, aquí no puedes dar balonazos, porque puedes dar a una persona mayor, a otro niño o romper alguna cosa”.

El niño reacciona mirándola sin inmutarse y sin mediar palabra, entonces la mami se da cuenta de lo que esta haciendo y muy digna pide perdón y le quita el balón al niño.
En menos de dos minutos, y mientras los padres vuelven a la carga con su tema, el niño le quita el balón a su madre, y sigue a lo suyo chutando la pelota en otra dirección.

Los padres tras chulear y abroncar al responsable de la tienda consiguen la devolución del regalo, el niño con sus chuts aleatorios consigue cargarse una lampara, asi que sus padres le echan una bronca de proporciones biblicas, que no debe ser la primera claro esta y que debe desembocar en absolutamente nada porque el niño esta tan tranquilo como cuando le regaño la buena samaritana. 

Conclusión, el niño sigue haciendo lo que le sale de los cojones, los padres no tienen ninguna autoridad sobre él, porque en algún momento de la educación de su hijo, perdierón su respeto y vio que podia hacer lo que le diera la gana, sin que sus malas acciones recibieran un justo castigo.



CONTINUARA......