Grandes son
las diferencias entre la cita perfecta para él y la perfecta para ella, a un tío
normal y corriente le molaría un espectáculo para divertirse (futbol, robots
asesinos contra camiones gigantes, cine de acción, etc), luego tomarse unas
copas y después un buen polvete.
Una mujer
tiene una idea completa y radicalmente distinta a la del varón medio español,
el romanticismo es fundamental, sentirse especial, hermosa y deseada, es la
mezcla que le hace sentirse receptiva al “Manolito” de turno. En definitiva que
hay que hacerla ver que es la más guapa, inteligente y maravillosa de las
mujeres que has conocido en toda tu vida (debes mentir como un gorrino en el
75% de los casos, y a lo bestia en algunos, que hay cada una que no la aguanta
ni su puta madre).
Tiene que
notar tu deseo, pero no solo el sexual, ponerte mulo y arrimarle el cebollo no
tiene futuro, salvo alguna borracha fistra que se deja a las primeras de cambio,
estas tipas no son muy habituales, y menos en España, país en el cual
encontramos el mayor numero de “estrechas” de Europa (y digo Europa solo por no
ser cruel).
Retomando,
ella tiene que sentir que la deseas tanto por su belleza, como por su
maravilloso interior, pero sobre todo por lo segundo, por lo increíble de su
personalidad (jajá), por sus deslumbrantes dones (jajajaja) y por su gran
inteligencia (jajajajajajaajajajaja). Aun así por mucho que le hagas la pelota
y demás, ella no se considera una cualquiera, porque, como el 75% de las féminas
españolas, se cree especial, no es una guarrilla que te puedas tirar en la
primera cita, así que te joderas y tendrás que seguir con el pico y la pala un
tiempo más (entre dos semanas y seis meses, todo en función de la edad y sobre
todo de lo “especial” que se considere la cansina de los cojones).
La cita
perfecta para ella se resumiría entonces en lo siguiente:
Quedar a la
hora que ella quiera y donde ella quiera, por supuesto pasaras a recogerla con
tu coche y este estará limpio y brillante, para que pueda ser su carroza principesca
en este cuento de hadas, ella lo merece tanto (en fin….), para ir donde tú le
sugieras claro, porque la tía no tiene ni puta idea, ni ganas, de decidir a
donde ir, para eso estas tu, que tienes la obligación social de tener un buen
plan para la colega.
Si no sabes dónde ir o
el sitio al que vayas no puede ser calificado de “romántico” estas jodido, le
estas demostrando que no eres “diferente al resto”, que ella no es especial
para ti, que vas a lo que vas, que no es otra cosa que mantener relaciones
sexuales cochinas, sin que te importen sus sentimientos (bingo!!!!).Para saber dónde ir lo mejor es consultar
alguna amiga tuya que tenga cerebro y buen gusto, o investigar lo que le gusta
a la susodicha.
Tras el romántico lugar donde la lleves, y disfrutar del espectáculo de
turno, donde ambos habéis gozado de la sensibilidad de los artistas (tócate los
huevos), el siguiente paso será compartir una romántica cena bajo la luz de las
románticas velas, en el romántico restaurante os mirareis a los ojos (bueno a
los ojos, y a lo que no son los ojos, ya me entendéis) y compartiréis vuestros
sentimientos, abriendo vuestros románticos corazones de par en par, dejando
que vuestras almas se choquen creando la chispa del deseo y desatando la pasión
por un beso lleno de ternura, amor y conexión. En resumen que te va pegar una puta brasa de todas sus gilipolleces de
tres pares de cojones, todo con cara de iluminada, mientras sujeta una copa
vinarro ( “narro” porque estamos en crisis y no estás para grandes derroches).
Ilusiones (más bien fantasias), trabajo, amistades, cremas hidratantes, gran hermano, etc, serán algunos
de los temas insoportables que te comerás (así es la vida, el que algo quiere…..algo
le cuesta).
Tras
la maravillosa cena la llevaras algún sitio de moda (mientras ella no para de
hablar, está un poco pedo ya y es que es un loro la jodia). Allí tomareis unos
cubatitas, para soltaros un poco, ella bailara para ti provocándote, para ver
si eres un caballero o el clásico guarrete que a la mínima le agarra las tetas.
No hace falta decir que eres un caballero,
o al menos lo pareces. En definitiva bailes sexys para ella, calentorros para ti.
Una
vez cierra el garito, “Manolito” propondrá ir a ver el amanecer algún sitio
precioso en el campo ( jugándosela con el coche, porque esta borracho, mucho ha
tenido que beber para aguantar a la tía esta). Si llegan vivos y sin multa para
“Manolito”, ambos se sentaran en una romántica manta (que casualmente lleva en
el maletero), para ver durante un cálido y sentido abrazo como el sol asoma por
el horizonte bañando con su calor sus rostros, mientras cubre de luz y
hermosura la naturaleza que los rodea. Con
el pedo que llevas, el frio que hace, el sueño que tienes………. y ahora el sol en
el careto dejándote ciego, esto no puede empeorar mas ( a menos que la de otra
vez por hablar de sus estupideces) y encima parece que la gilipollas esta lo está
disfrutando (para meter se debe ser firme, una vez llegado aquí, no hay marcha atrás).
En estos mágicos instantes es cuando “Manolito” debe arrimar
el morro (si puede ser con unas dulces palabras de amor mientras se acerca),
para conseguir “su” tan preciado trofeo, que no es otro que el beso de su amada
(si cojones, ya te ha enamorado).
La situación es tan bonita, confortable y única….tan
especial, que ella desea que al fin tengas tu más que merecido “beso”, que por
supuesto será en plan “peliculero”, nada de lenguaza a saco, ni malos alientos,
ni cosas raras. En definitiva te vas a
pegar un morreo bananero exento de pasión, bastante sosete (poca lengua) y por
supuesto nada de meter mano en las tetas que le quitas la magia al momento.
Finalmente la llevaras a casa, a menos que acepte ir a tomar
unos churros con chocolate para desayunar, porque evidentemente vives en España
y es el único churro que vas a mojar en esta primera y romántica cita. Cuando
la dejes en su portal, un piquito lleno de picardía y una mirada especial, pondrán
punto y final a esta maravillosa cita….. para ella.
¿Mirada especial?,
estas hasta la polla de hacer el subnormal toda la noche, soportar gilipolleces
y encima has pagado todo lo que os habéis tomado, en resumen:
-
Te has gastado un pastón.
-
Has soportado una brasa inhumana.
-
Estas borracho (solo Dios sabe cuántos
radares te has comido en los desplazamientos).
-
Has pasado un frio de cojones,
probablemente ya estés incubando algún constipado.
-
Solo te has dado un par de morreos, y
encima como si tuvieras catorce años.
-
Y lo más importante, no has follado
CONCLUSION: UNA PUTA MIERDA DE NOCHE,
LA LLAMARE A VER SI A LA PROXIMA CAE Y SI NO ES ASI, A OTRA COSA MARIPOSA.