miércoles, 15 de mayo de 2013

MONSTRUOS (VAMPIRO)


                        
                                        El no- muerto, rey de la noche, demonio de la sangre, succionador de yugulares, seductor de doncellas y también patán blanquecino hortera con un más que “serio” problema con la luz solar.

La mayoría de estos “chupasangres” son seres de avanza edad, quiero decir, que la mayoría tienen tropecientos años, fueron convertidos en rata voladora en la antigüedad, y se han tenido que adaptar a los cambios del mundo que les rodea, lo cual supongo que debe suponer un esfuerzo intelectual terrible, aprender nuevos idiomas, las diferentes formas de relacionarse socialmente, informática con todo el rollo del MS2 en primera instancia, para luego tener que seguir con el internet y sobrevivir  a todas las guerras que provocan los majaras de los “humanos”.

 En definitiva, entre víctima y victima a empollarte un libraco de Inglés, si eres un vampiro español no tienes ni puñetera idea, que convertirte en uno de ellos  no implica “adquisición de idiomas por enrrechupamiento” así que vas a tener que aprender para poder viajar por Europa resecando a incautos, vale, no es necesario que hables con tu víctima, pero ponte a razonar el tema del trasporte de tu ataúd de aquí para allá sin tener ni puta idea de idiomas, acabas en un psiquiátrico echando chispas (y por tanto “requemao” en tu habitación con las primeras luces del alba). Al principio será un poco penoso, porque intentaras seducir a la peña con tu inglés de Albacete….. “yo drinking tu blood mi lady”….. y no habrá manera de que te tomen en serio hasta que te los cargues (y con saña, no se estaba descojonado el muy subnormal de ti). Acabaras en una academia nocturna para conseguir aprender el puto idioma. Lo que no sabes es que más tarde tendrás que empezar con el alemán, luego con el chino, etc. Pero bueno, tiempo te sobra, porque eres inmortal, a menos que seas tan subnormal de ponerte a tomar el sol en Gandía, pero eso sí, vas acabar de estudiar mandarin hasta los mismísimos cojones.

                      Para ser uno de ellos, pues lo de siempre, estar en el sitio equivocado en el momento más inoportuno, vamos que te cruces con uno que tenga más hambre que un pakistaní y te desangre vivo. Este sería el supuesto “estándar” en el que te conviertes en vampiro solo por la mordedura de sus afilados colmillos (como en el caso de los hombres lobo), en otras versiones a menos que bebas sangre del vampiro que te merienda no te transformas, simplemente te mueres, así que para que ocurra, pues va ser cosa del vampiro que quiera comerte, tienes que haberle caído simpático al cabronazo este, o que tu culo le guste mucho, si es un “vampiriquita” (un vampiro mariquita) no bebas de su sangre, imagina lo que es aguantar una loca toda la eternidad, mejor que te mate a que te torture durante los siglos venideros con sus gilipolleces y su vocecilla afeminada. Si es una vampiresa buenorra a rabiar que te haga lo que le salga de las narices y le metes un tiento a su sangre como si fuera Don Perignon, siglos de orgias y sangre te esperan, te ha tocado el gordo, si es una gorda, no bebas su sangre, mejor diñala, que esa es gorda para siempre, es una “no-muerta” y no puede adelgazar, imagínate lo majara que esta y la puta brasa que te va a dar.

Se supone que el uso de tus poderes y demás precauciones solares que debes tomar te los enseña tu vampiro “creador” que te tomara bajo su protección hasta que puedas valerte por ti mismo, con el tiempo tomar caminos separados será cosa vuestra (si está muy buena no te sueltes de sus sedosas faldas).

 

                          Hay muchas versiones sobre los vampiros, en lo referente a las transformaciones de los mismos en seres de la noche, en bichufos malignos, Bram Stoker proponía múltiples: lobo, murciélago, baboso enamoradizo, rata y en una mierda de niebla. En otros casos y por norma general solo se transforma en rata voladora (murciélago) y en neblina cochinera, o al menos tiene el poder de generarla (espero que no a base de eructos choriceros) usándola para acojonar a sus víctimas (“¡noooooo niebla!, se me va a rizar el pelo”…......sin comentarios, vaya mega poder).

 Por lo que la transformación “base” seria en murciélago, su única utilidad, volar de aquí para allá, pero no largas distancias, en el fondo eres un bicharrufo que por muy grande que seas no eres precisamente un jet a reacción. Para colarte por las ventanas de las casas es útil, y una vez dentro generas la niebla, le jodes el peinado a la churri que has elegido para alimentarte y cuando este en el baño repeinándose, la metes un buen “bocao” en la garganta (al final la niebla va a ser útil también).

                                 En cuanto a los poderes, lo mejor, súper- fuerza, súper- velocidad, inmortalidad relativa (puedes cascar con una serie de cosas) y el poder del control mental sobre los humanos, vital para engatusar a la gente y que no se pongan a gritar como gorrinos cuando les succiones el pescuezo.

Nadie puede detenerte, de noche claro, de día tienes que esconderte bien, en un ataúd cómodo (si es que hay alguno así) o bajo tierra como una lombriz. Eres vulnerable así que ojito que te dan una dosis de rayos-uva y la palmas “entre terribles sufrimientos”.

De noche pueden joderte clavándote una estaca en el corazón o mediante la decapitación, así que lo mejor será no cantearse demasiado y andar con pies de plomo no vaya a cruzarse contigo un “Van Helsing” de los cojones y te vaya a putear hasta acabar contigo.

                           Ser un vampiro en España puede ser un coñazo, eso sí, estarías a salvo, porque hay tanto falto por metro cuadrado que no te va a escasear el alimento, y debido a este “faltismo” generalizado no vas a tener que molestarte ni en usar tus poderes de control mental, ¿para qué?.

No debes crear una prole demasiado grande, son españoles, son vagos, caraduras y te chuparan la sangre “metafóricamente” claro. Son una manada de inútiles, así que acabarás teniendo que alimentarlos personalmente y como encima son unos golfos más de uno palmará delante de todo el mundo con un horrible bronceado, todo problemas (llamando la atención de los “Van Helsing”).  

Mejor montárselo en plan solitario aunque ojito con tu acento de Europa del este (si lo tienes) y tus finas vestimentas (si tienes cojones de ponértelas), pues puedes parecer un vulgar rumano vestido de gilipollas o un mariposón de la pradera con aires “retro”.  

Modernízate respecto a la ropa, pule ese cutre- acento y ale a chuparle la sangre a la Carbonero por ejemplo, pero nada de convertirla que mira lo bien que le ha ido a Casillas.

                             Dominas mentes, revientas cráneos, te cuelgas boca abajo y le sacas partido al ataúd, si te lo montas bien puedes vivir como un crápula durante siglos, machacando a quien te moleste, cepillándote una lerda diferente cada noche y trincando sangre como una mula. “Pero no volveré a ver la luz del día”, que le den al sol por donde amargan los pepinos, soy inmortal y a casi todos los efectos “Superman”, que se jodan los amaneceres y esas mariconadas (que ya tengo bastante con el curso de informática y el de inglés para quebrarme la cabeza).

                          Un último detalle importante es lo referente a la erección en los vampiros macho, la vampira hembra con vaselina o lubricante lo tiene fácil, pero al macho como no se le ponga el tema firme esta jodido, porque si la colita no te tira “el follar se va a acabar”, y si esto es así queridos lectores, mejor que me liquiden, porque paso de ser inmortal sin poder mojar, eso sí que sería la peor de las condenas, así que…..si una noche os cruzáis con un hortera de ojos rojos y tras succionaros casi toda la sangre os pregunta si os queréis unir a él en las tinieblas, no seáis gilipollas y preguntarle si os va a funcionar el manubrio, y si la respuesta es “no” que se meta su macabra oferta por donde le quepa.